SANTO DOMINGO, RD.- El crecimiento que exhibe el Gobierno no se justifica con el poco desarrollo humano que se observa en República Dominicana, opinó el obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Santo Domingo, monseñor Víctor Masalles.
A su juicio, la realidad de la situación del país está fuera de las cifras frías y los números que presenta el presidente Leonel Fernández.
Al oficiar el Tedeum celebrado en la Catedral Primada de América, con motivo del 167 aniversario de la Independencia de la República, precisó que el país necesita un auténtico compromiso con el desarrollo, porque sólo con el bienestar de la mayoría se puede jugar el esfuerzo por progreso nacional.
Dijo que el papel de la iglesia en el país es reiterar sus críticas y su llamado a las autoridades para que dediquen la mayor parte de los fondos a una justa distribución del desarrollo humano y a los sectores como salud, educación y vivienda, entre otros.
“Como es posible que aparezcamos como los peores a nivel mundial de competitividad en educación, energía eléctrica, desvíos de fondos públicos y favoritismo en las decisiones gubernamentales, según el reporte del foro Mundial de Competitividad del 2010-2011”, se preguntó el prelado frente el presidente Fernández, el vicepresidente, Rafael Alburquerque y otros funcionarios presentes.
Sostuvo que la Iglesia Católica es la que mejor conoce el alma dominicana y la puede detectar cuando los intereses político y económico a buscan corromperse.
Recordó que el Mandatario catalogó la Constitución de la República como “Gigante de la Democracia del Siglo XXI”, y sin embargo, los indiciós que hay es que esos principios no son realidad, porque no se protegen los derechos fundamentales de los dominicanos.
Monseñor Masalles, dijo que se impone construir un Estado de derecho donde se respeten las leyes dominicanas.
Al oficiar el Tedeum celebrado en la Catedral Primada de América, con motivo del 167 aniversario de la Independencia de la República, precisó que el país necesita un auténtico compromiso con el desarrollo, porque sólo con el bienestar de la mayoría se puede jugar el esfuerzo por progreso nacional.
Dijo que el papel de la iglesia en el país es reiterar sus críticas y su llamado a las autoridades para que dediquen la mayor parte de los fondos a una justa distribución del desarrollo humano y a los sectores como salud, educación y vivienda, entre otros.
“Como es posible que aparezcamos como los peores a nivel mundial de competitividad en educación, energía eléctrica, desvíos de fondos públicos y favoritismo en las decisiones gubernamentales, según el reporte del foro Mundial de Competitividad del 2010-2011”, se preguntó el prelado frente el presidente Fernández, el vicepresidente, Rafael Alburquerque y otros funcionarios presentes.
Sostuvo que la Iglesia Católica es la que mejor conoce el alma dominicana y la puede detectar cuando los intereses político y económico a buscan corromperse.
Recordó que el Mandatario catalogó la Constitución de la República como “Gigante de la Democracia del Siglo XXI”, y sin embargo, los indiciós que hay es que esos principios no son realidad, porque no se protegen los derechos fundamentales de los dominicanos.
Monseñor Masalles, dijo que se impone construir un Estado de derecho donde se respeten las leyes dominicanas.
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