SANTO DOMINGO.- La Comisión de Hacienda del Senado se reunió este martes con el ingeniero Diandino Peña para agilizar el procesamiento de varios préstamos por un monto global de 251 millones de euros con los que se terminaría la segunda línea del Metro de Santo Domingo.
En total, la obra requeriría una inversión total ascendente a 770 millones.
Tommy Galán, senador peledeista por San Cristóbal y quien preside la Comisión de Hacienda, declaró que el ingeniero Peña explicó sobres los retrasos en la obra que determinan la urgencia en el conocimiento de la pieza legislativa.
Los fondos del proyecto están destinados a la compra de vagones, rieles, el equipamiento electromecánico, las líneas ferroviarias y otras herramientas que garantizarían la terminación de la obra en el transcurso de un año.
Las rutas alimentadoras
El ingeniero Diandino Peña, director de la Oficina para el Reordenamiento del Transporte (Opret), descartó que en la actual gestión de gobierno se pueda llevar a cabo el proyecto de las líneas alimentadoras del Metro de Santo Domingo, como era el interés del mandatario Leonel Fernández.
En sus declaraciones, el funcionario aseguró no obstante que la prioridad del Presidente Fernández y el gobierno es terminar la segunda línea del Metro.
Peña destacó que al terminar su segundo período consecutivo el Presidente Leonel Fernández dejará inaugurada la segunda línea del Metro de Santo Domingo.
En su opinión, “construir dos líneas de un Metro constituye una hazaña para un presidente lo cual no tiene precedentes en el mundo”.
El funcionario fue entrevistado en el Senado cuando participaba en la reunión de la Comisión Permanente de Hacienda que preside el senador peledeista por San Cristóbal Tommy Alberto Galán, donde se analizan varias iniciativas legislativas relacionadas con la construcción de la segunda línea del Metro de Santo Domingo.
Como si fuera otro metro
El director de la Opret, Diandino Peña, dijo que las rutas alimentadoras del Metro de Santo Domingo constituyen un proyecto de tanta envergadura en términos de costos y de magnitud de la obra en sentido general “que es como si construyéramos otra línea del metro”.
Peña señaló que las obras como los patios, terminales, talleres y otras requieren de una infraestructura que aun no ha sido concebida.
Explicó que por tales motivos el presidente no podrá ejecutar la obra en su período de gobierno que finaliza el 16 de agosto del próximo año.
Refirió que la ruta uno del Metro transporta más de 100,000 pasajeros por día, cuya movilidad en las rutas alimentadoras será un proyecto de una gran magnitud que deberá hacerse a futuro.
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