SANTO DOMINGO.- El presidente de la Confederación Nacional de Transportistas Unificados (CNTU), consideró que lo más importante en esta coyuntura de aumentos generalizados en los precios de los combustibles, y las consecuentes secuelas de alzas que provoca esa situación en los precios de los artículos básicos de consumo, así como en los servicios, solamente podría solucionarse modificando la Ley de Hidrocarburos.
Ramón Pérez Figuereo, dijo que la actual ley de Hidrocarburos resulta obsoleta y perjudica considerablemente a los transportistas, y, por consiguiente, al pueblo en general, destacando a seguidas, que para su modificación este lunes 21 de marzo se reunirán de nuevo con el presidente de la Cámara de Diputados, Abel Martínez, a quien plantearán algunas de las razones que justifican la rápida modificación dicha ley.
El dirigente sindical se expresó en esos términos al encabezar una asamblea de propietarios de negocios y transportistas ubicados en el entorno del Mercado Nuevo, que serían desalojados de esa área por el alcalde del Distrito Nacional, Roberto Salcedo.
Los asambleistas que se reunieron en las instalaciones donde funciona un garaje ubicado en la Avenida de Los Mártires de Villas Agrícolas los que están organizados en la CNTU.
Al ser cuestionado sobre la decisión de dejar sin efecto el llamado a paro que habían hecho las principales organizaciones del transporte a partir de este lunes, en rechazo de las medidas anunciadas por el presidente Leonel Fernández, en su discurso dirigido el pasado jueves a todo el país, donde adoptó una serie de disposiciones en procura de ahorrar combustibles y que tocaban principalmente el funcionamiento del transporte público de pasajeros y de carga, Pérez Figuereo, significó que resulta imposible aplicar dichas disposiciones, especialmente porque las mismas no resuelven nada, por lo que consideró que lo primero que debería hacerse para ir solucionando los problemas en ese sentido es modificar la Ley de Hidrocarburos existente, ya que a través de esta disposición se perjudica considerablemente no sólo a los transportistas, sino primordialmente al pueblo, especialmente a las amas de casa, quienes tienen que adquirir el Gas Licuado de Petróleo (GLP).
Afirmó que el Gobierno recibe por concepto de impuestos más de 65 pesos por cada galón de gasolina, significando que debe trabajarse con entereza a fin de modificar la Ley de Hidrocarburos.
Dijo que esperan acordar con el presidente de la Cámara la modificación a dicha disposición legal que afecta considerablemente al sector transporte y también a la población.
Recordó que en el 2008 el presidente se comprometió en el caso del galón de GLP fijar el precio del galón de este combustible a RD$63, pero que ese acuerdo nunca fue cumplido.
El dirigente sindical, por otro lado, llamó a los transportistas a que no entreguen las tarjetas de Bonogás bajo la promesa de que sus unidades serán convertidas a gas natural, debido a que los vehículos existentes en el transporte público en su mayoría no califican para que se haga esa transferencia de GLP a gas natural.
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