jueves, 30 de septiembre de 2010

Murió a los 85 años el actor Tony Curtis


LOS ÁNGELES,EEUU.- Tony Curtis, el niño que se escapaba al cine para huir de su pobre infancia y llegó a lo más alto después de subir y bajar varias veces las escaleras de Hollywood, murió hoy a los 85 años.

La "meca" del cine dice adiós al gángster, al amante, al cómico y al mujeriego que aseguró que más de mil mujeres se habían rendido a sus encantos, incluida la diva Marilyn Monroe.

Rozar sus labios fue "como besar a Hitler", bromeó al final de su papel de músico disfrazado de mujer y a la fuga que la sedujo en "Some Like it Hot" (Billy Wilder, 1959) .

A sus 85 años, murió por una enfermedad que le acompañó durante sus últimos meses y que acabó por robarle la vida.


Pero él prefería explicarlo de otra manera: "He estado enfermo durante la mayor parte de mi vida, en mi cabeza".

Atrás deja un legado de más de cien películas, cinco matrimonios, -el primero con la actriz Janet Leigh ("Psico")- y una carrera que terminó sin Oscar.

Siempre lo quiso, pero sus tiempos dorados como galán de Hollywood se desvanecieron y pasó a ser el actor de filmes poco aclamados, como "Lobster Man from Mars" (1989).

Pero, como lo hacía cuando era un niño pobre que se escapaba al cine para olvidar los golpes que su madre esquizofrénica le propinaba, a mitad de su carrera, volvió a encontrar en el cine su
bote salvavidas.

Entonces actuar era una distracción para alejarse de su adicción a la heroína y su dolor por la muerte de su hijo mayor, que falleció a los 23 años por una sobredosis de drogas.

De pequeño, la butaca y la oscuridad de la sala de cine fueron el refugio de un niño que quería olvidar lo que había fuera. Allí era el espectador de historias inolvidables, pero al encenderse las luces volvía a ser el hijo de un sastre inmigrantehúngaro que nunca trajo suficiente comida a la mesa.

Junto a su hermano Julius, Curtis terminó en un orfanato, lo que convirtió a la pareja en un dúo inseparable que volvió al hogar familiar semanas más tarde.

Pero la tragedia se volcó sobre él y un fatal atropello acabó con la vida de Julius cuando Curtis tenía 12 años. Le tocó identificar al cadáver. La traumática experiencia dejó el guión de la vida del
actor escrito: sólo se tenía a sí mismo.

El resto lo dictaron actores como Cary Grant, su ídolo y después amigo, interpretando "Destination Tokio", una película sobre un submarino espía que inspiró al joven Curtis. Era 1943, el momento de
entrar en la Armada.

Además de experiencias a bordo, los viajes marítimos le dieron la oportunidad de subir al primer escenario de su vida con el uniforme de la Armada puesto en una escuela de Illinois.

Pero en 1945 fue descubierto por una agencia de cazatalentos quele hizo sus maletas a Hollywood y con 23 años ya tenía un contrato con Universal Pictures.

No hay comentarios:

Publicar un comentario